No hubo vencedores, ni vencidos en la primera final del Apertura entre Nápoli Argentino y El Salado
Un empate 1 a 1 marcó el tablero de la final de ida del Apertura “Héctor Halty” de primera división de la LCHF, cuando Abigail López indicó el silbatazo final en la cancha de Nápoli Argentino en Ranelagh entre el local y Agrupación Deportiva El Salado de General Belgrano, en esta soleada tarde del último domingo de julio.
La historia quedó para resolverse en “La Estancia” de General Belgrano, el próximo domingo y el final está abierto para determinar si el “verdolaga” suma su cuarto título en el historial liguista -empardando la marca de su clásico rival, Club Belgrano- o sí por su parte, el “napolitano” es el vigésimo cuarto equipo en anotarse en el historial de campeones de primera división.
El empate a priori le cerró mejor, a El Salado, que logró remontar la desventaja en la que se encontró pasados los diez minutos del complemento, más en una cancha de dimensiones que suele complicar a los visitantes. Claro está que si bien en esta primera foto, el elenco de Gustavo París quedó mejor parado, deberá ratificar esa circunstancia como local en una semana.
No puede soslayarse que en este torneo, si bien por primera vez llegó a la final, a Nápoli le ha costado sacar ventaja de local y de hecho sobre nueve juegos en Ranelagh -con de esta final- ganó cuatro, empatando tres y perdiendo dos.
En tal sentido, no cuenta con la efectividad de los años anteriores, aunque también es cierto que en los primeros dos años, los rivales venían a jugarle “más a mano” y en el último lo hacen de otra manera.
Contando con jugadores de mediacancha en adelante, movedizos rápidos que juegan sin posiciones fijas, han trabajado para mejorar su perfomance de visitante en este año, y en canchas más amplias -como la de El Salado- parecen sentirse cómodos.
Consideraciones estas que avalan que nada está cerrado y que si la primera final fue “puesta nomás, caballeros” como diría algún antiguo amante de las carreras cuadrera de caballos, la segunda ofrece un signo importante de interrogación respecto a su resolución final.
En esta primera el trámite del partido fue propio de la instancia que se jugaba. Con mucho despliegue físico, ímpetu, voluntad, ganas, fricción y poco espacios, y solo con acciones del juego esporádicas que muchas veces no prosperaron porque de ambos lados se cortaron de raíz.
En ese contexto si bien el trámite fue duro y con roce, no hubo acciones desleales. En mucho que ver, además de la disposición de los protagonistas, también la postura de Abigail López -segunda mujer en dirigir una final liguista de varones, la anterior fue Daiana Ilari- de ejercer su autoridad, llevando un partido de riendas cortas. Lo que que expuesto que cuando en seis minutos -entre los 26 y los 32 del primer tiempo, dispuso dos expulsiones, una por lado. Primero le tocó a Facundo Zocchi por doble amarilla y después a Nahuel Lazo Zurita que vio la roja directa.
La etapa se fue sin goles.
Las llegadas fueron por pelotas detenidas o remates de fuera del área. Algo lógico y a tono con el desarrollo propio del juego, que siguió siendo apretado y friccionado, aún cuando los dos quedaron con diez y hubo algún espacio mayor como para poder jugar.
Pero los creadores de ambos lados estuvieron bien controlados, y en el caso de Arriola más aún porque Loyola lo conoce bien de su pasó por El Indio, donde lo tuvo al ahora 10 verdolaga.
En el complemento, de arranque París dispuso que Eijo tomara el lugar del amonestado Miranda, lo cual le permitió hacer algo más flexible su disposición táctica en base a algunos movimientos posicionales.
Empero en el arranque las características del partido siguieron en la misma tónica, dentro de un trámite disputado en la zona media donde nadie mezquinaba nada a la hora de disputar cada balón.
Nápoli demostrando que en ofensiva, puede lastimar en cualquier momento porque tiene capacidad individual, pasó a ganar cuando tras habilitación de Bustos a Yedro, este con remarte rasante y cruzado hizo estéril es el esfuerzo de Del Valle para anotar el 1-0.
El Salado, casi lo empata un par de minutos después de una pelota detenida, que Latorre anidó en la red, pero que López invalidó por el banderín en alto del chascomunense Gabriel Igarategui marcando posición adelantada.
El visitante empero tendría una clara chance para empatarlo a veinte minutos del final del tiempo reglamentario, pero Naranjo en gran intervención le ahogó el grito de gol a Facundo Pérez, con una estirada fenomenal para sacar la pelota al corner. De este, Arriola terminó cabeceando desviado cerca de un palo.
Con el ingreso de Franco Zocchi (un delantero) en el lugar del volante Borda -que con cuatro amarillas estaba al límite y se podía perder el desquite- París buscó reforzar su ataque para buscar empate.
El arquero Naranjo, que se hizo gigante -más allá de su porte físico- demoró la igualdad sobre los 35 cuando sacó de un ángulo, al córner un disparo que que Pérez despachó de primera tomando el balón de aire. De la ejecución del tiro de esquina, llegó la mano de un defensor local en su área, sancionando la jueza López la pena máxima para la visita.
El experimentado Latorre se encargó de la ejecución, para empatar el juego después que el arquero fuera a un palo y la pelota al otro.
Nápoli no pudo quebrar el empate en los más de quince minutos que se jugaron hasta el final, si bien lo intentó. En especial con pelotas aéreas, pero no tuvieron el resultado esperado.
El Salado se hizo fuerte atrás, pero también pudo amar una buena combinación de ataque que pudo terminar en gol, pero la definición de Barreto no fue la más adecuada.
Así todo se resolverá en “La Estancia” en siete días, donde en caso de un nuevo empate, los disparos desde el punto penal habrán de determinar al nuevo campeón. Claro está que de haber un vencedor en los noventa minutos, será el que se quede con el título.
Ambos tendrán las bajas de los expulsados. Facundo Zocchi en los belgranenses y Lazo Zurita en Nápoli, equipo que también sumó como baja al zaguero Cáceres Leitez que llegó a la quinta amarilla.
SINTESIS
Cancha: Nápoli
Juez: Abigail López
Nápoli Argentino: Nicolás Naranjo; Dylan Quinto (Pablo Ezquieta), Marcos Cáceres Leitez, Tomás Modzelevsky, Lautaro Santos; Román González (Hernán Salvatori), Bautista Pizzi, Lucas Busto (Mauro Pozzoli); Juan Castro, Nahuel Lázaro Zurita, Marcos Yedro (Rodrigo Riera). DT C. Lavagnino-P. Loyola.
El Salado: Marcos Del Valle; Alexis Córdoba, Matías Latorre, Roque Gómez, Valentín Miranda (José Eijo Aneas); Joaquín Borda (Franco Zocchi), Martín Luna, Matías Arriola (Ignacio Farran) Tomás Barreto (M. González); Facundo Zocchi, Tomás Barreto (M. González), Facundo Pérez. DT Gustavo París
Goles: ST 11m Yedro, 36m Latorre, de penal
Incidencias: PT 25m exp. Facundo Zocchi, 32m exp. Nahuel Lazo Zurita
UNO A UNO
También hubo empate en la primera final de 6ta división
En el partido jugado de preliminar de la final de primera división, en la primera final de 6ta, Nápoli y Castelli empataron 1 a 1.
La visita se adelantó en el marcador con gol olímpico de Facundo Celasco y lo empató Alejo Pombar para el dueño de casa.
En definitiva de las cinco finales de ida disputadas, cuatro fueron empates y una sola tuvo un ganador que fue la de 4ta, donde Deportivo Castelli superó de visitante 2-1 a El Salado.
Las finales de 6ta y 1ra terminaron 1-1, al igual que la de 3ra entre El Salado y Deportivo Castelli. Estos mismo rivales, en 5ta división empataron 0 a 0.
Fuente: Radio Sport