
Las últimas grandes apariciones de la paleta chascomunense no perdonaron a veteranos en decadencia, demostrando que lo viejo no siempre funciona

La paleta es un deporte cada vez más popular en Chascomús y, por ello, los desafíos intergeneracionales son bastante habituales en el Templo de la calle Sarmiento.
Justamente el trinquete del Club de Pelota Chascomús fue escenario de la puja entre lo nuevo y lo añejo en el deporte vasco lagunero.
Demostrando que lo viejo no siempre funciona, las últimas grandes apariciones de la paleta doméstica no perdonaron a veteranos en decadencia.
Tal es así que Luis Ferrari y Juan Funes, para muchos los futuros Manco y Fito, vencieron 20-14 a Leandro Balda y Canasta Iriarte, los cuales no aguantaron la presión (y los kilos) por lo que tuvieron que abandonar en la revancha.
Según los presentes, fue una verdadera clase la brindada por los ganadores, que dejaron sin palabras (lo que es mucho decir en el caso del Loco) ni piernas (eso lo sufrió un poco más el exportado a Lezama) a puro efectos, potencia y despliegue físico.