La Aprevide está revisando canchas de la LCHF y este jueves habrá reunión con los clubes liguistas en Chascomús
En una reunión “larga y compleja” del Consejo Directivo de la LCHF, la cual no estuvo habilitada para los medios de comunicación que cubren las novedades liguistas, el foco de las discusiones estuvo puesto en los hechos de violencia que están complicando la continuidad del Torneo Apertura, la cual, en principio, parecería estar garantizada.
Es que tras el meeting realizado este lunes en Tiro Federal, donde estuvieron presentes prácticamente todos los clubes (salvo Social de Pila y Racing de Bavio) y en el que el eje de lo sucedido pasó por los incidentes en Lezama y Castelli, la Agencia de Prevención a la Violencia en el Deporte (Aprevide) está revisando hoy martes las canchas liguistas junto al presidente Luis Seillant.
Además, este jueves a las 17 en el estadio municipal de Chascomús, el Juan Silverio Oroz, la Agencia dependiente del Ministerio de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires tendrá reunión con los afiliados a la LCHF, donde comunicará la situación de las instituciones y la Liga misma, recordando que ayer lunes parecía “inminente” la prohibición del público visitante en los reductos de la Chascomunense.
En este contexto, y entendiendo que la revisión de las canchas y la posterior reunión con la LCHF sería una nueva chance que estaría dando la Aprevide a los clubes liguistas antes de la determinación anunciada, es que el Apertura podría continuar su andar, ya que no son pocos los que consideran que sin público visitante sería difícil seguir jugando el primer torneo liguista 2023.
Y en cuanto a seguir jugando, se desconoce dónde y cuándo completarán el partido El Salado y LeFu Club, el de los incidentes en el Higinio Aparicio de Lezama con el marcador 2-1 a favor del Verde y posterior un fallo del Tribunal de Penas que sorprendió a todos y dejó indignados a demasiados.
Es que la LCHF programó los 20 minutos restantes en el estadio municipal de Pila, el José Minghetti, pero lo hizo sin tener la autorización de la comuna, que justamente rechazó tal posibilidad, lo que también habría sucedido en otras canchas neutrales liguistas.
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