Joaquín Tobio Burgos cortó una racha de 39 años sin goles “laguneros” en la máxima categoría de AFA

Las páginas deportivas de los principales diarios y portales del país como también los programas especializados de la televisión y las radios, en estas horas hablan de Joaquín Tobio Burgos que en el día de su debut en primera división (reemplazó en el ST al experimentado “Principito” Sosa) lo hizo con un gol, que además por si fuera poco le dio el triunfo a su equipo Estudiantes de La Plata ante Banfield por 2 a 1 en el marco de la 17ma fecha de la Copa de La Liga Profesional.

Joako -que hasta hace un par de años mostraba sus condiciones en las canchas de la LCHF con la camiseta de Atlético, tras pasar antes por Tiro Federal- cumplió “el sueño del pibe” y seguramente el 7 de octubre de 2024 quedará grabado de manera muy significativa en su historia de vida.

Pero en el orden del fútbol de Chascomús, Joaquín Tobio Burgos cortó una racha de 39 años, 6 meses y 17 días sin que un jugador oriundo de nuestra ciudad marcara un gol en la máxima categoría de AFA.

Cierto es que en los últimos cuarenta y años no fueron muchos los chascomunenses que tuvieron la ocasión de jugar en la máxima categoría del fútbol argentino. En el nuevo siglo apenas si Agustín “Pato” Correa en 2005/06 en Vélez Sarsfield y Tomás Sives en 2022/23 en Defensa y Justicia y en Arsenal de Sarandí. En ambos casos sin poder convertir goles.

Hasta la tarde/noche del lunes en que Joako Tobio Burgos marcó en el “Florencio Sola”, el último jugador que había marcado en un torneo superior de AFA había sido Juan Pedro Gauna, jugando en el Nacional de 1985 para Santamarina de Tandil.

Fue ante Independiente de Avellaneda, en el partido de ida de la Ronda de Ganadores del último de “los viejos nacionales” -que se jugaron a partir de 1967- “el Colo” de tiro libre batió al arquero Carlos Goyen, en el partido disputado el 20 de marzo de 1985, en el estadio de la “doble visera de cemento” cuando se jugaban 9 minutos del primer tiempo, para poner el 1-0 para los serranos.

Después el rojo -Goyen; Clausen, Villaverde, Trossero, Carlos Enrique; Giusti (Reinoso), Marangoni, Bochini, Burruchaga; Percudani, Clara (Merlini)- lo dio vuelta con goles de Percudani (PT 33m), Reinoso (ST 26m) y Percudani (ST 40m) para ganar por 3-1.

En el elenco tandilense que dirigía Daniel Romeo, estaban otros tres chascomunenses. Los hermanos Néstor y Marcelo Armendáriz -ambos con paso en la máxima categoría de AFA y sin goles- y el delantero Raúl R. Sommi, que nativo de nuestro medio desde muy chico se afincó con su familia en Tandil. También en el aurinegro era parte de ese plantel “el Negro” Manuel Cheiles, nativo de Magdalena.

Ducca; Solimanto, N. Armendáriz, M. Armendáriz, Conti (Cheilles); R. D. Tarabini (Ervitti), Gauna, Portugal, Lacava Schell; Sommi, Coria jugaron por los tandilenses esa noche en Avellaneda.

Antes de ese gol al elenco rojo, el Colorado Gauna había marcado otros dos goles en la máxima categoría del fútbol argentino.

El primero de ellos jugando para San Lorenzo. Fue el 18 de abril de 1976, en el Metropolitano (13º fecha), a los 27m del ST ante el arquero Munutti de Argentinos Juniors, en la victoria 4-2.

El volante central marcaría su segundo gol en la máxima categoría de AFA el Nacional de 1982, el 25 de abril de ese año jugando para Guaraní Antonio Franco de Posadas Misiones ante Estudiantes (Santiago del Estero), en tanto que convertido a los 18m del ST significó el triunfo del equipo misionero por 1 a 0.

El anterior gol en la máxima categoría del fútbol nacional de un chascomunense, fue el que Ricardo Omar Girado con la camiseta de Banfield le convirtió -también el Florencio Sola- a River Plate, por la 18va y última fecha de la etapa clasificatoria del Metropolitano de 1974, el 19 de mayo de ese año en la victoria 3-0 de “El Taladro”.

El gol de Girado fue el segundo para su equipo, que antes anotó por Alberto Jesús Benítez y después por Angel Silva.