El Topito Londero sobre Charly Berlocq: “Siempre me gustó su forma de pensar y de ver el tenis”
Juan Ignacio Londero tiene al chascomunense Carlos Berlocq como entrenador desde hace una semana. Juntos, vislumbran un regreso en el Challenger de Montevideo. El Uruguay Open, que se disputará del 7 al 13 de noviembre, es la zanahoria que persigue por estas horas el cordobés.
El Topito, que inició este lunes su segunda semana de trabajo con su nuevo entrenador, se pone a punto para retornar al circuito -”si todo sale bien”- con las esperanzas renovadas y un nuevo equipo de trabajo encabezado por el Gladiador de Chascomús.
Su idea es volver en el Challenger de Montevideo, allí donde el año pasado encontró su mejor versión y alcanzó su mayor cantidad de victorias consecutivas en el año hasta llegar a la final. Justo un año después de aquella definición que perdió frente a su amigo boliviano Hugo Dellien pero en la que ganó la confianza que necesitaba para volver a creer en él.
Su camino es tan espinoso como el del año previo, magro en resultados (hay que remontarse hasta el Córdoba Open en febrero para encontrar tres victorias consecutivas en un cuadro principal) y con una inflamación en el hombro derecho que lo tiene a maltraer desde abril.
Esta vez, en su afán por renacer no tendrá a su lado al “Gringo” Andrés Schneiter, con quien trabajó hasta mayo después de Roland Garros. Tampoco con “Tony” Pastorino (quien continuó junto al “Topito” hasta hace dos semanas). Londero apostó por un extenista de mentalidad ganadora y una garra contagiosa para dar vuelta la página y empezar de nuevo. Otra vez.
“Empezamos a trabajar el lunes y la verdad es que hicimos una muy buena semana de entrenamiento. Es un entrenador que me puede aportar varias cosas”, valoró el tenista de Jesús María, para quien “fue una decisión importante haber empezado a trabajar” con Berlocq.
“Lo conozco hace bastante, desde su época como jugador, y siempre me gustó su forma de pensar y de ver el tenis”, sumó el número 188 del ranking mundial, quien se enfrentó a Charly sólo una vez en el circuito y le ganó en sets corridos en 2019.
“Estamos empezando este nuevo proceso, con muchas ganas”, comentó el tenista de 29 años, quien llegó a ser 50 del mundo en 2019.
“Del hombro vengo evolucionando bastante bien. Hace dos meses ya que estoy acá haciendo la recuperación, con fisioterapia y entrenamiento”, dijo sobre su lesión.
Las canchas de polvo de ladrillo de Buenos Aires lo vuelven a tener esta semana en acción, atento a lo que diga Charly, decidido a demostrar, otra vez, que él también es un Gladiador.
Fuente: La Voz del Interior