De correr en karting y probar en Fórmula 4 a tener 712 autitos de colección y realizar ilustraciones y pinturas del deporte motor

Luis Stella es un apasionado de los fierros, al punto que fue piloto de karting y probó un Fórmula 4, pero la vida lo fue alejando de las carreras, hasta que encontró la manera de seguir disfrutando del deporte motor: los autitos de colección, 712 precisamente, y las pinturas e ilustraciones, que terminan siendo su cable a tierra.

Oriundo de Lezama, establecido hace décadas en Chascomús y con trabajo en General Belgrano, Luis supo ser parte del Auto Moto Club de su pueblo, hasta incluso animó el kart zonal, llegando a consagrarse subcampeón en divisional ganada por su coterráneo Jorge Coronas.

“Recuerdo que el Viejo Musmeci me dio todo lo que tenía para correr en karting y el Vasco Ochoteco hizo un gran laburo de preparación. Tratábamos de estar en todos los detalles. Corríamos contra tipos como Pagouapé y Legarralde, entre otros, pero llegaba Rubito Manzoni y nos pasaba el trapo. Qué piloto el gordo. El día que pierdo el título me dio una mano bárbara, frenaba a todos para que yo avanzara”, comentó en diálogo con EL SUPLENTE.

Y además, en su momento, junto a Ramiro Infante, Javier Massini y Ramiro Trémoli, Stella protagonizó prueba con el Fórmula 4 que fuera de Alfredo Echarri, organizada por Gustavo Sommi en Dolores.

“Alfredo había dejado de correr y Gustavo nos llevó a probar. Estaba la Peña apoyando en ese entonces, pero no pudo ser.  Para correr en auto, necesitas plata y yo no la tenía”, recordó.

Con tal panorama, el cual fue cambiando – a fuerza de trabajo – como así también sus prioridades – formó una familia e incluso hoy es abuelo -, el vecino chascomunense se transformó en otro de los tantos espectadores de las divisiones regionales, nacionales, continentales e internacionales, al punto de disfrutar más de ellas que de Boca Juniors, su club, pero curiosamente sin tener un fanatismo por alguna marca en particular.

“Si tengo que elegir una marca, sería Chevrolet, pero no la tengo definida, al punto que tengo un Ford como auto. A mí me gusta el automovilismo y, como piloto, Matías Rossi, al cual tuve la oportunidad de conocer en La Plata, en carrera de Top Race, tras invitación recibida luego de obsequiarle una pintura de su auto”, señaló.

Ahora, con eso, no alcanza para Luis, que en su casa tiene dos vitrinas repletas de autitos de colección, tanto de carrera como de calle, además de camiones, motos y lo que haya estado a su alcance, importados, de series especiales, hasta algunos realizados a pedido, como el del piloto chascomunense del Turismo Carretera, Pablito Costanzo.

“Tengo una gran relación con los Costanzo, tanto con Pancho y como con Pablo, como también la tengo con Raúl Aparicio y Gustavo Sommi. Tuve que conseguir un Torino para que me hagan el ploteo y hoy tenerlo en la colección”, informó Luis, que tiene como ídolos al argentino Lole Reutemann y al brasileño Ayrton Senna.

Y las ilustraciones y pinturas del deporte motor también son una pasión para el lezamense, pero partiendo como un hobbie, nunca como una obligación, un trabajo o un encargue, que los tuvo en casos puntuales.

“Me gusta pintar cuándo quiero y sobre lo que quiero, porque bajo un cambio. En lugar del ir al psicólogo o hacer boxeo, dibujo y pinto. Realmente es súper recomendable tener un hobbie. Hace muy bien. Me da un poco de vergüenza mostrar mis obras, porque las hago para mí y seguramente puede ser que al resto no le guste. Tomé algunas clases, pero me falta. Cuando me jubile y tenga más tiempo, seguiré perfeccionándome”, terminó Luis Stella, un fan del deporte motor que supo adaptarse a las circunstancias de la vida sin abandonar lo que le gusta.